A veces no es necesario tener que decir todo lo que quisieras, pues el solo hecho de tener esa inquietud, habla ya por si misma. Traspasa los poros de tu piel, aumenta el brillo de tus ojos, enrojece tu mejillas, porque sencillamente posee una fuerza que ni nosotros mismos conocemos. Quizás esos son los subtítulos. Un beso.
A veces no es necesario tener que decir todo lo que quisieras, pues el solo hecho de tener esa inquietud, habla ya por si misma. Traspasa los poros de tu piel, aumenta el brillo de tus ojos, enrojece tu mejillas, porque sencillamente posee una fuerza que ni nosotros mismos conocemos. Quizás esos son los subtítulos. Un beso.